Letur es arte forjado en piedra, un paraíso rodeado de aguas cristalinas y puras. Enclavado en un entorno privilegiado, la villa de Letur conserva uno de los cascos históricos más rico y fascinante de la provincia de Albacete. Desde tiempos inmemorables este asentamiento ha atraído a todas las culturas que han pasado por él, desde el Paleolítico al Neolítico, íberos, romanos, árabes y cristianos. Todos han dejado huella en los variopintos parajes de su término municipal formado por las aldeas de La Abejuela, La Dehesa de Iznar y la Sierra de Zacatín.


Pero la cultura que ha dejado mayor huella en la fisionomía actual de Letur ha sido la musulmana: el trazado urbano es de tradición andalusí, forjando su impronta en el trazado de la calles, alcantarillado, sistemas de regadío como acequias, balsas de riego, hormas…todo Letur es un conjunto arquitectónico realizado en tapial, a base de tierra, agua y cal, junto con piedra, madera y caña, con grandes muros blancos de escasa decoración, arremolinado entorno a la Plaza Mayor que es la parte más alta de la Villa. Las calles están adornadas con una rejería  característica de herreros autóctonos, y puertas de madera peculiares, que nos indican que hubo una importante artesanía de la madera, identificando a los talleres que dieron lugar a estas bellas creaciones, siendo algunos de sus herederos seguidores de la tradición.


LETUR

Naturaleza, Piedra y Agua.